Versión extendida del artículo publicado en 
Si bien soy médico y creo que toda la vida pensé en serlo, de niño podían tenerme quieto viendo documentales de Jacques-Yves Cousteau (1910-1997) y de Carl Sagan (1934-1996), tal vez no entendería todo lo que hablaban pero me fascinaba ver las imágenes y poco a poco entender lo que me decían estos personajes.
Hoy mi perro lleva el nombre de Cousteau, tal vez al explorador no le gustaría mucho saber que un perro se tiene su apellido por nombre, pero así es. Lo que me resulta impresionante es ver como la gente no entiendo o no sabe el por qué mi perro se llama así. En un principio pensé que era mi pésima pronunciación del francés, pero poco a poco me fui dando cuenta que no era así, que aunque yo lo creía cotidiano y normal, no todo mundo sabía de él y de Carl Sagan tampoco.
Lo que es un hecho es que todos están bien enterados de series televisivas como The Simpson, Family Guy, King of the Hill, etc. Particularmente las dos primeras han cautivado la atención de muchos. Debo aceptar que me divierto viéndolas, sobre todo dándome cuenta que es una crítica ácida de la sociedad norteamericana y que en muchas ocasiones nos pega de paso.
Pues bien, creo que la noticia que vengo leyendo desde hace algunos días me llena de esperanza, será más fácil ahora que los niños de hoy y sus padres de paso, conozcan una de las grandes obras de Carl Sagan, quien sin duda es uno de los más grandes divulgadores de Ciencia y promotores del escepticismo. Tal vez una de sus obras más fascinantes fue la serie de documentales titulada Cosmos, escrita en colaboración con Ann Druyan (viuda de Sagan y divulgadora de Ciencia) y Steven Soter.
El 5 de agosto leo primero en Bad Astronomy un blog de Discover y posteriormente en Amazings.es la noticia de que dicha serie será nuevamente puesta en circulación, esta vez remasterizada por el creador de Family Guy, Seth MacFarlane, en equipo con Druyan y Soter. La producción es auspiciada por National Geographic y Fox y el anfitrión será el astrofísico y divulgador Neil deGrasse Tyson.
Realmente espero que este tipo de proyectos atraiga a grandes y pequeños y que genere en estos últimos el crecimiento de esa semilla de curiosidad, la cual si es cultivada cuidadosamente puede dar grandes científicos, en todos los ámbitos y sino al menos hombres y mujeres con un bagaje cultural mucho mayor que el que lamentablemente tenemos ahora.