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La bata blanca, ¿necesidad real o tradición impuesta?

Imagen: felixmaocho.wordpress.com

Recuerdo cuando era chico y acompañaba a mi padre a su trabajo, verlo caminar con ella puesta y luego voltear a mi alrededor y ver tantos entes caminando orgullos con otra igual sobre sus hombros, en realidad es que era un objeto cuasi mágico con el cual soñaba vestirme alguna vez. De niños algunos sueñan con su capa de mago, con la Superman o con infinidad de vestimentas distintas, yo siempre quise portar una bata blanca.

Ya en la secundaria, cuando empiezas con tus clases en los laboratorios de Biología y Química, entre las hormonas a todo lo que dan y la ignorancia de lo que esa vestimenta implica en un futuro, tu cabeza se dispara y empieza a elevarse, ¡no te la quitas ni para ir al baño! Poco a poco empiezas a aburrirte de ella, pero sigues con la ilusión de que un día esa bata se acompañe de un estetoscopio y que tenga tu nombre bordado con la abreviatura Dr. precediéndolo.

Al llegar a la facultad, ilusionado te pones los zapatos blancos, los calcetines blancos, los pantalones blancos (por su puesto los calzones blancos, sino todos verán los corazoncitos), la camisa blanca, el cinturón blanco, la corbata y por su puesto ¡la bata blanca!. Caminas cual pavorreal, urge que todo el mundo voltee hacia donde estás… llegas y ves que a tu alrededor hay más de 1000 personas que visten el tan preciado atuendo, en realidad en ese mundo, lo único que logra es opacarte, el día que te vistas de negro o de rojo, ¡ese día brillarás! ¡Ah! pero han de terminar las clases y saldrás a la vía pública con dicho atuendo (tal vez ya un poco sucio del uso diario) pero es la oportunidad perfecta para que te vean, aunque los profesores te dicen que te quites la bata al salir del hospital para evitar la contaminación (de adentro hacia afuera y visceversa), haces caso omiso y caminas con ella por todos lados, te metes al metro, te subes al autobús, manejas con ella y si pudieras duermes con ella. Cuando llevas 6.5 años viviendo con ese atuendo empiezas a aborrecerlo, de pronto se te ocurre que quieres estudiar una especialidad, así que el «disfraz» lo tendrás al menos unos 3 años sino es que una decena más. Entonces empiezas a aborrecer el blanco en tu ropa y cuando ya no quieres usarla, los zapatos blancos, las camisas blancas, las chamarras blancas, son el accesorio de moda.

Pero no empecé este artículo tan solo para hacer un anecdotario del uso de la bata en el estudiante-residente, sino por que hoy, pensando de qué escribiría para no dejar pasar mucho tiempo, vi mi bata colgada frente a mi, muy mona en un gancho y me dí cuenta que después de tanto pelear por ella, poco a poco, la he ido haciendo a un lado y quiero comentarles el por qué, para luego recibir sus impresiones.

Tal vez guiado un poco por el aburrimiento de vestirme tanto tiempo igual, particularmente al salir del internado con las guardias y los uniformes que al terminar, más que blancos parecían grises o quizás movido por el hecho de estar en el servicio social, rodeado de tierra y lodo, con un mucho calor y donde podía lavar muy poco mi ropa (la blanca recién lavada con un ventarrón quedaba peor, por lo que esa la llevaba a que me la lavaran en una lavandería una vez al mes), poco a poco fui dejando mi bata a un lado, misteriosamente empecé a notar que la gente se me acercaba más, particularmente la gente mayor y los más jóvenes. Esta serendipia me llevó a tomar una nueva actitud, me dí cuenta que más allá del estatus que me pudiese dar la bata, ese objeto de deseo infantil y puberiano, prefería la cercanía con mis pacientes. Puedo encontrar mil y un razones que justifiquen su uso y un número similar que apoyen mi noción, tal es el caso del fenómeno de hipertensión por bata blanca.

Hablemos de este último fenómeno para tratar de explicar mi teoría (que aclaro puede ser errónea):

Es cierto que el fenómeno de la hipertensión por (o de la)  bata blanca, no está forzosamente relacionada a esta prenda, sino que ha sido denominada así por el hecho de que la gran mayoría de los médicos la utilizan. Pero este fenómeno demuestra, en base a muchos estudios realizados, el efecto que el simple título de «médico» puede tener en un paciente. Si el simple hecho de saber que acuden a un consultorio puede generar tanto estrés en un paciente, ¿qué sucederá si al sentarse en el consultorio lo primero que ve es una bata blanca y un estetoscopio colgando del cuello?

La realidad sea dicha es que aunque muchos manejarán que es una cuestión de higiene, es más que nada una tradición heredada, creo inclusive más antihigiénico el uso de este implemento que se tiende a lavar menos que la ropa que nos quitamos y ponemos día a día. Es simplemente un símbolo del que ni los mismos médicos saben su signficado e historia. Además de ello es un sistema de «defensa» del médico ante cualquier imprevisto con el paciente, es poner un letrero de «yo soy el que sabe»,»yo soy el que manda» o algo así como «cuidado médico adentro». Lo mismo sucede con el fenómeno del estetoscopio colgando del cuello, que si bien en el hospital tuve la experiencia de que era mejor usarlo así que verlo robado, no tiene mayor utilidad y bien puede guardase en la el bolsillo del mismo pantalón y en tu consultorio mantenerse en el área de exploración.

En resumen, yo soy de los que han ido rompiendo con las costumbres y suelo atender a mis pacientes sin tal vestimenta, jamás he tenido problemas en establecer los «roles» de médico y paciente, por el contrario la relación la siento más cercana, con mayor confianza. En el trabajo gubernamental llevo una, pero suelo dejarla colgada en un «perchero» improvisado en la lámpara de pie. Sin tener estudios controlados, basado en mi propia perspectiva, esto me ha dado resultado, pero en honor a la verdad otras fuentes señalan lo contrario (tengo qeu buscar el estudio original y ver si se menciona el cuestionario y este no era tendencioso).

Quiero aclarar que no es lo mismo hablar de la bata en el consultorio que de un uniforme quirúrgico donde si tiene un papel real de asepsia y antisepsia o inclusive de la bata en un laboratorio, donde esta es una vestimenta de protección.

¿Qué opinan? ¿Es la bata un implemento necesario o impuesto por la tradición o se trata de un arma egocéntrica del gremio médico?