¿Por qué no subirme al tren del meme y hablar de la tesis de EPN y de los #Lords y #Ladys de las redes sociales? ¡Vamos pues, platiquemos un rato de ellos!
Hace ya algún un rato que no escribo, afortunadamente por falta de tiempo. He seguido leyendo, ya luego escribiré mis reseñas, pero esta vez quiero subirme al tren del meme o más bien de los memes.
Quizás sea un tema recurrido, una propuesta ya sonada, sin nada que aportar, pero bien vale, aquí en estas cartas, dejar escrito lo que pienso.
Recientemente Aristegui sacaba otro trapito del Enrique Peña Nieto a la luz: su tesis tiene al menos un 30 % de plagio. Lamentablemente de Peña Nieto esto ya no me sorprende, tampoco que esto sucediera en la Universidad Panamericana (ya me dirán de la calidad moral del Opus Dei) o en la Universidad Nacional Autónoma de México, donde el Peje tardó 14 años en titularse tras 19 materias reprobadas y 16 extraordinarios, para terminar su brillante carrera con un 7.76 de promedio (soy orgullosamente puma, pero como en todas, la UNAM tiene sus manchas).
Aun así dudo mucho de la calidad periodística de Aristegui y su equipo. Así como el escándalo de la famosa “casa blanca” de Angélica Rivera alias la Gaviota implicó una investigación más seria, esto no requiere de mucho esfuerzo pero lo anunciaron como si fuera a ser la revelación del robo del siglo y la verdad, lo que sí resultó ser, fue un excelente manejo mediático, en donde me incluyo, difundí la noticia como borrego, pero de trascendencia, poca, me explico:
Enrique Peña Nieto ¿algo nuevo bajo el Sol?
No, no me mal interpretes, un robo de tesis, porque eso es plagiar una frase, una idea y en este caso el 30 % de “su trabajo”, un ROBO, obviamente habla de la calidad moral de nuestro presidente, ese por el que una inmensa mayoría voto por ser “guapo” y que ahora ni eso les ha cumplido; ese presidente que nosotros (yo no voté por él, pero esto es una democracia y eso hace que diga nosotros) subimos al poder.
Reitero NOSOTROS lo subimos al poder, basta de lavarnos las manos y aclarar que no votamos por él, lo hizo el pueblo y TÚ eres el pueblo… (además no estoy tan seguro de que no hayas tachado su cuadrito en la boleta electoral).
Cuando no supo ni decir tres libros muchos salieron a burlarse, pero no vieron la gravedad de tener un presidente inculto, porque tristemente y aquí está lo grave del asunto, por ley, nuestro presidente NO TIENE OBLIGACIÓN DE TENER TÍTULO UNIVERSITARIO ALGUNO. Y aunque dije que es triste, también defiendo esa postura, porque el mismo derecho tiene de serlo aquel que llegó al posgrado como aquel, que su gobierno y su país, no le dieron la oportunidad de tener educación alguna, porque la calidad moral de una persona no se mide en su título, así pues, en el supuesto de que la Universidad Panamericana invalide su tesis y la Dirección General de Profesiones borrara su cédula, eso no lo hace perder su título de presidente, ese que aunque digan que fue robado, nosotros como pueblo se lo otorgamos, aun sabiendo que no podía decir tres libros, ni sumar 2 + 2.
Cuando salía todo esto a la luz, puse un tweet, en respuesta a aquellos que mostraban encabezados de prensa extranjera en donde ministros de otros países renuncian tras haberse descubierto que habían hecho el mismo fraude en sus tesis. Me parece perfecto, y defiendo que esto debería hacer nuestro presidente, no por tener o no su título, sino por su falta de calidad moral, pero… Como pueblo ¿podemos exigir esto si somos los primeros en hacer trampa?
Por ahí hay quien también quiere desacreditar la opinión de Aristegui argumentando que ella ni siquiera está titulada. Bien, para opinar, como ciudadanos, vuelvo a repetir, no hace falta tener un título, ¿no haría falta contar con él para ser un líder de opinión? Pues no soy líder, pero si opinólogo, y este blog lo demuestra, no creo que haga falta.
¿Hace falta para ser titular de un noticiero? Quizás sería lo idóneo, pero tampoco lo creo. Aquí el meollo de otro asunto y que me perdonen los comunicólogos, pero ¿para qué la carrera de Comunicación? Si futbolistas retirados, buenos o maletas, modelitos sin mucho cerebro (hombres y mujeres), etc. son los que ocupan los puestos titulares de programas.
#Lords y #Ladys cuando se critica lo que tenemos en casa
No hace falta ir muy lejos, todos hemos dado RT a los videos de los #Lords y #Ladys, muchos de ellos borrachos y manejando, lo mejor es que en varias ocasiones cuando me llegan, el que lo reenvió es alguien del que sé, sale de una fiesta, ¡tomado y manejando!
Los ciclistas filmando a gente haciendo desmanes, maltratando policías, pero en el último (el de #LordJeep), hostiga al conductor (que no queda claro qué hizo mal) hasta que lo harta y sí, lo golpea, yo que el conductor lo demandaba por acoso, y ya lo he dicho, respeto al ciclista porque lo soy, pero, ¿quién les da derecho a pasarse un alto, a chatear mientras van en la bici, etc.? Sí, tienes derecho a usar un carril, EN CASO DE SER NECESARIO, pero lo idóneo es que uses el de lenta, no el de rápida, como he visto a varios.
Grabamos policías dándose besos y exigimos que cumplan con su deber cuando somos nosotros mismos mismos quienes luego andamos pagando mordidas, protestando por los nuevos reglamentos de tránsito, molestos porque ponen radares o detectores para no pisar las cebras, si nos paran por ir a exceso de velocidad o no llevar el cinturón.
Dicen que de todo se agarran los policías, pero son las mismas normas que cumplimos sin chistar cuando vamos a Estados Unidos o Europa. Recuerdo cuando un día pasé una garita, tras cruzar la frontera de Estados Unidos, el coche que iba frente a mi a buena velocidad y en forma decente, abre la ventana y tira una bolsa de basura, acelera, quema llanta y comete más infracciones.
¿Cómo podemos pedir vivir en un mejor país si no hacemos nada para que esto cambie? ¿Cómo exigimos tener un buen gobierno si no podemos ni gobernarnos a nosotros mismos?
Personalmente intento aportar mi granito de arena, ayudando al que puedo y/o al menos sin fastidiar al de a lado. Si un día ves que la riego, no dudes en decirme, pues soy bueno criticando, pero también oyendo tus críticas y trato, al menos, de mejorar día con día.
Así pues, deja de criticar, ponte a actuar.